SOMOS España; propuesta de izquierda contra la UE

Hoy puede ser un buen día para presentaros a un partido de izquierda muy pequeñito, contrario a la secesión territorial de España, que aboga por una salida en un largo plazo de la Unión Europea, que considera que las mejores políticas para las clases trabajadoras son las de creación de empleo y no las subvenciones, y que ve la urgencia en la reindustrialización y la recuperación de tejido productivo de nuestro país (cada día se da un paso atrás, cada día se hace más difícil).
A título personal os comento:
Que conjuguen todas esas características, sólo les conozco a ellos, si bien con otras formaciones y personalidades hay muchos puntos en común. Las posibilidades de trabajar conjuntamente son nulas. Ahora estoy en la fase que eso ha dejado de preocuparme.
Ellos ahora mismo son muy pocos pero incluso fusionados o coordinados con los demás la cosa tampoco iba a mejorar en cuanto a representatividad en la sociedad.
El video tiene un mal sonido. A mí no me importa pero evidencia su ausencia de medios. Estar de acuerdo al 100% es lo de menos. No me veo sacándome el carnet ni en el medio plazo. Ya he pasado por eso.
El partido no es nuevo de por sí – es una refundación – y su dirigentes, siendo jóvenes, no deben haber empezado ahora su militancia política. Su propuesta por los precedentes que he sufrido este último lustro no tienen por qué tener un largo recorrido. Más vale que sus ideas no se entierren por el futuro de nuestra nación.
Con todo este panorama, va siendo hora que se vayan recopilando y difundiendo voces de izquierda, por minoritarias que sean, con sentido de Estado y que trabajen desde la situación real que vivimos, para dar a conocer a la sociedad.
Los dirigentes que tengo en mente, de sobra conocidos, aparte de destrozar de manera premeditada y orquestada todo atisbo de izquierda organizada, dan vergüenza ajena al ciudadano sin adscripción política, son repudiados por el votante de centro y de derecha moderada – con razón – y son un sapo que consideran se tienen que tragar para por lo menos el 25% de los votantes de izquierda. He sido prudente en la estimación del porcentaje.
El trabajo a día de hoy se tiene que desarrollar desde la humildad y la tolerancia a la frustración. Si algún día resurge un proyecto organizado, puede ser de nuevo derribado como un castigo de naipes. Si en el futuro los objetivos principales se los acaban apropiando e implantando el resto de formaciones políticas ¡bienvenido sea!